Sigue sin convencerme la noción del lenguaje como instrumento. Me sigue pareciendo que la sumisión de las palabras a las categorías técnicas no responde a su específica realidad. Creo que extender la idea de todo uso del lenguaje como "instrumento" quiere decir reducir precisamente la idea de usos del lenguaje a un solo uso: Si todo uso del lenguaje refiere a usar las palabras como herramientas para "hacer" cosas distintas, ¿no es así que en nrigor sólo existe un uso, el de la instrumentalidad y la hegemonía de la metáfora técnica? Por otro lado, para añadir algo más, creo que existe una diferencia entre el instrumento técnico y las palabras que no es deseable despreciar: el instrumento sirve para hacer cosas a su través, mientras que en el habla no sólo realizamos a través del lenguaje, sino que realizamos EN el mismo lenguaje.
Decir "instrumento" parece suponer en cierto modo una teleología, una "meta" predefinida. Creo que se usa el lenguaje, como se usa la mano. Creo que es un resultado evolutivo que se descubre y usa porque "está ahí" en un momento dado más o menos a la vez que "la conciencia" de aquello. Como tal resultado, es como los demás: es imperfecto en más y en menos. Al tenerlo, lo usamos para muchas cosas, no simplemente para "hacer" sino para "parecer", para "lo lúdico", para "lo innecesario", para "impresionar", "conmover", "confundir", "mentir", etc., pero está ahí y cada vez que nos venga bien usarlo (o creamos que nos viene bien, o sintamos que nos viene bien...) lo usaremos, como bien sepamos y con resultados satisfactorios o penosos... "Está ahí" y también nos permite llorar, expresar desesperación, herir, defendernos... En estos sentidos hasta nos permite hablar con "uno mismo", por ejemplo, al despotricar contra el mundo, al "hablar con Dios", etc. Por eso nunca (entiendo) será posible el sueño apaciguador del positivismo lógico. Entre otros.
Vaya... Borja, cada día pareces más Heideggeriano. ¿para cuándo "Ser y Tiempo"? Es verdad lo que dices, pero al fin y al cabo hasta para hablar del lenguaje tenemos que acudir al lenguaje. En una cosa te voy a dar la razón: el lenguaje no siempre es un instrumento entendido según la metáfora de la técnica, aunque sí es siempre un "hacer algo" o si prefieres un simple "hacer". En tanto que instrumento técnico, como señala Carlos, tiene unos fines determinados y un uso, pero no siempre ocurre esto con el lenguaje. En ocasiones desconocemos por completo que tenga un uso y lo habitamos en el modo del juego; es un juego que no tiene por qué llevarnos a algo exterior a sí mismo. Sin embargo estos momentos no son en modo alguno el resultado de una voluntad y mucho menos del genio artístico. Se dan como se da el aburrimiento: sobrevenido. Pronto, ese modo de lucidez, desaparece en la pura nada o deviene instrumento.
¿Serías capaz de decirme qué quiere decir cada uno, o tú en particular, Eduardo, cuando se califica a alguien de heideggeriano con lo que cuesta entenderlo al menos en el detalle? Entiendo mucho más "nietzscheano", pero no "heideggeriano". Tal vez deba por fin seguir con Ser y Tiempo cuya versión del FCE me ha hechado para atrás varias veces después de un puñado de páginas... ¡Estoy dispuesto, como le dije a mi sobrino (¡otro que este año acaba Filosofía, y al que podríamos invitar a sumarse a Feacios si os pareciera bien!) a... tomar clases de Heidegger para ir más allá de mi visión genérica en base a la lectura de unas pocas páginas y conferencias de sus últimos tiempos (como Tiempo y ser). Un saludo (ah, por cierto: qué fue de los vinos? Nunca me quedo tranquilo cuando algo se diluye... je...)
Carlos: creo que lo de "heideggeraniano" no es más que un pequeño modo de azuzarme, ¿no, Edu? Aquí la palabra sí es un instrumento para darme una colleja, y supongo que la ironía que guarda proviene de aquellos años de juventud en la universidad. En cuanto a lo del vino, tienes razón en recordarlo, porque creo que no puede quedarse en un proyecto, y además sería una buena ocasión para charlar otro rato con la excusa de la entrega.
Creo que no se me entendió (¡tanta ironía y alegoría tiene, claro, su penalización!). Preguntaba realmente acerca del sentido que le da el que lo usa en "sentido estricto" o "en serio" cuando se refiere a ciertas posiciones "aparentemente", por lo visto, "heideggeriana". ¿Se trata de hacer referencia acaso a lo especialmente "existencialista", a lo "nihilista"...? De todos modos, tendré que meterme con Herr H. antes o después... digo...
Saber que el lenguaje es una herramienta implica primero "saber" que hay algo que puede manejarse de una manera determinada para un fin específico.
Una el lenguaje es una "herramienta", tecnología de la edad del hierrro, pero la Ilíada fue escrita en la edad del bronce...
Ludwig se quedó a medias, un juego del lenguaje implica un tablero en donde desarrollar ese juego.
Sí, hay algo más allá de la herramienta; el martillo implica una madera y un clavo, si es un martillo de carpintero, pero si es un martillo de un forjador, puede implicar metales y cuñas...,
Pero que hay..., seguro que hay..., y había cosas y hechos y aconteceres mucho antes del área de Broca...
Anónimo señala hacia la ontología como "previa", y lo es en tanto sus "objetos" "soportan" o son "base material" de los "objetos" de la epistemología. O eso asumimos necesariamente... Incluso con formas precisas que no por nada, insisto, je..., no son las mismas según quién las plasme o narre, cuándo y dónde lo haga, etc.
Tomo de todos modos lo que dice Anónimo como refrendo de su parte de lo que vengo sosteniendo... en la medida de mis posibilidades... Como por ejemplo lo que dije en relación a "lo real" en mi(s) comentario(s) al post de Oscar (quien por cierto creo que me debe una réplica después de mi "aclaración").
¿Por qué el lenguaje permite el error y la mentira? ¿Por qué fantasea?
Porque es simbólico, porque la apertura del símbolo a un sistema en el que todas las posibilidades pueden encontrar su asiento nos permite conjeturar hipótesis, aventurar teorías...
¿Le compete al martillo que en vez de percutir sobre un clavo, quien lo maneja dirija su acción contra la cabeza de otra persona?
¿Le compete al lenguaje errar, falsear o fantasear?
¿Frente a la capacidad lingüística hay una habilidad cognoscitiva?
¿Frente al lenguaje está la cosa? Ver el lenguaje como un instrumento?
O es más bien el mundo lo que se quiere instrumentalizar, hormarlo lingüísticamente?
"Porque es simbólico, porque la apertura del símbolo a un sistema en el que todas las posibilidades pueden encontrar su asiento nos permite conjeturar hipótesis, aventurar teorías..."
Para mí lo peor es el "Porque...". El lenguaje es un resultado, nace en la interacción y por ello se debe a ella, es "prisionero" de la interacción. Por eso "se miente" con él y por eso "se (cree) decir la verdad (... mintiéndose)". Lo mandatorio es el interacctuar, y si se puede hablar... pues mejor para la interacción, que complejiza la supervivencia y responde a su imperativo conservador. El lenguaje también es cosa. Cosa es cosa para el hombre que necesita y/o le viene bien usar la cosa. Pero toda cosa tiene su propia dinámica y está entre las cosas de manera distinta y en relaciones distintas con las cosas (incluso con las cosas que la componen, y que a su vez interactuan con las cosas...), y todo eso es creación constante de cosas y sus relaciones... Sólo es una pretensión irrealizable establecer un cuadro completo. No sólo por inconmensurable sino porque todo a nuestro alrededor se recrea sistemáticamente. No obstante, nos basta la aproximación coherente llena allí donde haga falta el relleno de invenciones metafísicas (y la ontología es una parte, y la epistemología, y la ciencia...) En este sentido, el lenguaje nos viene bien, pero en el fondo, es así porque lo tenemos, nada más, y porque al tenerlo hemos aprendido a usarlo en mayor o menor medida, con la misma imprecisión e imperfección que todo lo que está en equilibrio inestable en el mundo... según lo aprehendemos y hasta donde lo aprehendemos.
Bueno, todo sea por juguetear un poco con todo esto... Un saludo.
a) El electrón se mueve en una órbita circular alrededor del núcleo bajo la influencia de la atracción Coulombiana de éste, obedeciendo las leyes de la mecánica clásica.
b) Dentro de las infinitas órbitas clásicas, el electrón se mueve sólo en aquellas en las que el momento angular orbital L tiene los valores L=nh=nh/ 2π , donde n=1,2,3,….
c) Cuando el electrón se mueve en una órbita permitida, no irradia energía electromagnética a pesar de ser acelerado constantemente y por lo tanto su energía total E permanece constante.
d) Un electrón que se mueve inicialmente en una órbita de energía Ei puede cambiar discontinuamente su movimiento y pasar a moverse en otra órbita de energía Ef ; cuando esto ocurre se emite un fotón cuya frecuencia es ν =(Ei −Ef)/h.
¿Los postulados de Bohr..., instrumentalizan el lenguaje, son tan sólo lenguaje, describen o recrean una realidad no lingüística, traducen la matemática o la reinventan con categorías nuevas como verbos, sustantivos, preposiciones, etc...?
No creo que estos postulados tengan la misma naturaleza que la siguiente frase: “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme...”, o de: “ Cuando los elefantes se aburren de machacar la hierba de la sabana, agitando sus tremendas orejas, son capaces de alzarse una decenas de metros sobre el suelo y dar brincos, si no volar, durante varios segundos, nunca más de 30, por entre los matorrales”.
a) El electrón se mueve en una órbita circular alrededor del núcleo bajo la influencia de la atracción Coulombiana de éste, obedeciendo las leyes de la mecánica clásica.
b) Dentro de las infinitas órbitas clásicas, el electrón se mueve sólo en aquellas en las que el momento angular orbital L tiene los valores L=nh=nh/ 2π , donde n=1,2,3,….
c) Cuando el electrón se mueve en una órbita permitida, no irradia energía electromagnética a pesar de ser acelerado constantemente y por lo tanto su energía total E permanece constante.
d) Un electrón que se mueve inicialmente en una órbita de energía Ei puede cambiar discontinuamente su movimiento y pasar a moverse en otra órbita de energía Ef ; cuando esto ocurre se emite un fotón cuya frecuencia es ν =(Ei −Ef)/h.
¿Los postulados de Bohr..., instrumentalizan el lenguaje, son tan sólo lenguaje, describen o recrean una realidad no lingüística, traducen la matemática o la reinventan con categorías nuevas como verbos, sustantivos, preposiciones, etc...?
No creo que estos postulados tengan la misma naturaleza que la siguiente frase: “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme...”, o de: “ Cuando los elefantes se aburren de machacar la hierba de la sabana, agitando sus tremendas orejas, son capaces de alzarse una decenas de metros sobre el suelo y dar brincos, si no volar, durante varios segundos, nunca más de 30, por entre los matorrales”.
A veces una corta frase "orienta" y a veces hace falta toda una novela. La "orientación" se consigue a veces de manera directa y hasta impositiva (los 10 mandamientos) o buscando "conmover" (los mitos más sutiles, la literatura...). La ciencia intenta "orientar" en dos o tres fases: primero asumiendo que su valor emancipador es absoluto y deájndolo fuera de discusión; después poniéndose a trabajar sin más, "sirva o no", sea o no "moral"; por fin... sirviendo al poder o sea cediéndole la función "orientadora". Esta "división de fases y del trabajo" nacida de la apriorística asunción de que "la verdad" será alcanzada "trabajando" en términos científico-modernos y dejando de hablar de lo que no se puede hablar (o "se muestra"), se la debemos al racionalismo ilustrado (Kant en primer lugar de importancia).
En ese sentido, los productos realizados mediante el lenguaje (y la escritura, que añade otra dimensión al asunto y le da al lenguaje "más" atributos que "antes" de su invento) son comparables si se los toma a cada uno en su especificidad y no si sólo se los compara formalmente y por trozos (unas palabras de El Quijote, no dicen nada, o al menos no dicen lo que toda la novela, etc.).
En sí, de todos modos, el lenguaje es algo más en nosotros. Otra cosa son sus productos, insisto y lo que hacen/se-hace-con ellos.
Hum, creo que lo voy perfilando de alguna mnanera...
El lenguaje, capaz de predecir y de errar, porque es capaz de aventurar. Hace 20.000 años, el hombre necesitaba aventurar un acontecimiento... la caza del mamut....
Se planifica, se inventa, se juntan signos lingüísticos, se alientan y dan ánimos... Luego parten hacia donde pacen estos paquidermos... son muy grandes..., esto es observable, y deciden que no es buena idea, mejor regresar y descarnar la carroña de una búfala kilómetros más atrás...
Hace apenas 100 años se necesita aventurar una idea para el movimiento browniano..., y nació la incertidumbre..., hablar de lo invisible, cerrar la crítica de Kant y volver al noúmeno...
¿Qué movía a Heissemberg a no aceptar la mecánica de ondas de Schrödingen? Un problema de estilo. A él le gustaba más la mecánica de matrices que, por su puesto, él había elaborado...
-Borja: Sigue sin convencerme la noción del lenguaje como instrumento. Me sigue pareciendo que la sumisión de las palabras a las categorías técnicas no responde a su específica realidad. Extender la idea de todo uso del lenguaje como "instrumento" reduce la idea de usos del lenguaje a un solo uso: Si todo uso del lenguaje refiere a usar las palabras como herramientas para "hacer" cosas distintas, ¿no es así que en rigor sólo existe un uso, el de la instrumentalidad y la hegemonía de la metáfora técnica? Por otro lado, para añadir algo más, creo que existe una diferencia entre el instrumento técnico y las palabras que no es deseable despreciar: el instrumento sirve para hacer cosas a su través, mientras que en el habla no sólo realizamos a través del lenguaje, sino que realizamos EN el mismo lenguaje.
a.1.- Hay una naturaleza de la palabra devaluada al ser limitada a un sistema categorial técnico que convierte a la capacidad lingüística humana del lenguaje en un uso instrumental, técnico, [entiendo aquí] facultativo de un discurso característico. Pero este uso es sólo uno de sus usos posibles.
a.2.- Instrumentalizar el lenguaje implica una externalización de un agente y un paciente no lingüísticos, en el que el primero usa un instrumento [mental], que es el lenguaje, para afectar a un segundo. Pero ese agente en realidad no es externo al lenguaje, sino interno [no sé bien si consustancial] y recíproco.
a.2.1.- Si el lenguaje es instrumento, no implica que, al menos, el paciente deba participar de él para ser afectado. Bástese la idea de que una persona puede instrumentalizar un taco de hierro acoplado a un mango [martillo] para golpear un clavo; pues el martillo y el clavo no han de ser consustanciales, es decir, el martillo no implica la existencia de un clavo (puede golpearse cualquier otra cosa); lo que sí implica el martillo es una acción, la de percusión eficiente, al ser instrumentalizado por un agente, quien golpea.
a.2.2.- En el acto de habla, ha de haber una relación inequívoca y, de alguna manera, consustancial, entre el agente y el paciente, siempre visto la alocución como algo que de enuncia para repercutir en alguien.
Pero...
b.1.- El lenguaje es paradigmático, luego no hay sumisión del lenguaje al tecnicismo, sino especialización semántica de un tipo de palabras que originan discursos. La palabra /mano/ implica semas diversos que en el acto de habla podrán ser técnicos en diversos campos (la mano para un fisioterapeuta, para un escultor, para un pianista, para un especialista en manicuras)
b.1.2. La posible sumisión del lenguaje al instrumentalismo se daría en un nivel muy superior, en el propio acto de habla, si no hubiera lugar a más semas [o sentido completo] que los impuestos por uno de los interlocutores en todo momento de la acción comunicativa y en todo lugar.
b.1.3. Complicar el acto de habla asumiendo que es el lenguaje es un hábitat, origina una posición extravagante en el sentido de que el agente-paciente del acto del habla terminan habitando un espacio que ellos mismos componen, originan...: es como decir que Dios termina habitando el Paraíso.
b.1.4.- Creo que esto es un error al confundir lenguaje con comunicación. El acto de habla se realiza en el comportamiento comunicativo, con una capacidad mental denominada lenguaje
-Carlos: Decir "instrumento" parece suponer en cierto modo una teleología, una "meta" predefinida. Creo que se usa el lenguaje, como se usa la mano. Creo que es un resultado evolutivo que se descubre y usa porque "está ahí" en un momento dado más o menos a la vez que "la conciencia" de aquello. Como tal resultado, es como los demás: es imperfecto en más y en menos. Al tenerlo, lo usamos para muchas cosas, no simplemente para "hacer" sino para "parecer", para "lo lúdico", para "lo innecesario", para "impresionar", "conmover", "confundir", "mentir", etc., pero está ahí y cada vez que nos venga bien usarlo (o creamos que nos viene bien, o sintamos que nos viene bien...) lo usaremos, como bien sepamos y con resultados satisfactorios o penosos... "Está ahí" y también nos permite llorar, expresar desesperación, herir, defendernos... En estos sentidos hasta nos permite hablar con "uno mismo", por ejemplo, al despotricar contra el mundo, al "hablar con Dios", etc. Por eso nunca (entiendo) será posible el sueño apaciguador del positivismo lógico. Entre otros.
a.1- No todo instrumento supone un fin específico. Ha de entenderse lenguaje como capacidad lingüística, como instrumento, y la mano como capacidad prensora, como instrumento.
a.2.- No hay más fin en esta instrumentalización que el de habilitar soluciones en la interacción con el entorno.
a.2.1.- Al igual que no utiliza la mano igual un prestidigitador, que un cirujano o un arquero, no utilizarán el lenguaje distintos agentes en entornos diferentes, ni el propio agente según interactúe en un momento u otro.
Pero...
b.1- El lenguaje denominado común parece tener ciertas funcionalidades. Funcionalidades y no Funciones porque ninguna ha de verse superior a otra, ni ha de verse como un algo compacto que va usándose y resolviéndose en funciones en cada acto, sino como una materia maleable que se adapta, cambia, selecciona o superpone dependiendo de un acto de habla dado, abierto, inesperado, imprevisible en cierto grado.
b.2- El lenguaje, su funcionalidad, no depende de la voluntad del agente, sino de la interacción entre agente y paciente del acto. No se puede usar lúdicamente el lenguaje si pretendemos superar las pruebas de selección para un puesto de trabajo, o razonar con una mujer que acaba de enviudar intentándola hacer comprender que todos somos mortales y bastantes frágiles al impacto de un automóvil.
b.2.1.- Sí hay una finalidad en cada acto de habla, aunque no transcendente, sino práctica, el de la comunicación eficiente.
b.3.- Vuelve a poder decirse que es un error confundir lenguaje con comunicación. El acto de habla se realiza en el comportamiento comunicativo, con una capacidad mental denominada lenguaje, capacidad maleable y adaptativa al proceso del acto de habla.
b.3.1.- Comportamiento Comunicativo → [una] Acción [comunicativa eficiente] → varios modelos de actuación : M acción= ƒ 1, ƒ 2, ƒ3, ƒx, ..., ƒn funcionalidades
b.3.1.1.- Comportamiento Comunicativo → Chomunicación [humana] → M acción
b.3.1.2.- Instrumentalización = M acción ƒn,
b.3.1.3.- CC = Ch [M ƒn: I ] ,
b.3.2.- Diferentes tipos de actos de habla requieren, en suma, una sólo caracterización como acto, una sola teoría de la actividad comunicativa anterior, primaria, frente a las derivaciones prácticas de tal actividad.
b.3.3.- Toda acción persigue un logro, posee una motivación, una preexistencia como estrategia, una elección que, al ser mental, dada neuralmente (evolucionada, capacidad biológica) debe de estar limitada a un número concreto de pautas, necesita de una Competencia, término que a mi, particularmente me ha dejado de gustar, y prefiero denominar Comportamiento Comunicativo, y Conducta Lingüística en vez de Actuación, porque al verlo como actividad, se me queda corto tanto internismo psicológico.
b.3.4.- Es posible, entonces, determinar un grado de eficiencia en cuanto el Lenguaje como conducta, o mejor dicho subiendo niveles, como comunicación entre hombres (humana), tiene un uso que si bien no está exento de interpretación por estar motivado, es interpretable.
b.3.4.1.- Puede decirse de una Instrumentalización que es fallida o incorrecta si la motivación de tal instrumentalización no produce resultado eficiente.
P. ej.: Observar microorganismos con un telescopio = Instrumentalización fallida. Observar al vecino con un telescopio = Instrumentalización (tras interpretación).
En Ch: Uso lúdico del lenguaje en entrevista de trabajo = Instrumentalización fallida. Uso lúdico del lenguaje en un escenario = Instrumentalización (tras interpretación).
b.3.5.- Pero no siempre puede Instrumentalizarse el Lenguaje. A veces el lenguaje nos traiciona y se presenta como independiente de nuestra conciencia, como conducta instintiva, como un posible ƒ x dentro del M ƒn . A esto se le denomina errores, como las confesiones accidentales que los psicoanalistas buscan al obligar al paciente a hablar y a hablar hasta que se borran los límites de la Conducta aprendida y aparece una relación de significados reveladora.
b.3.5.1.- El lenguaje o comunicación con uno mismo, “hablarse a uno mismo”, la neurociencia está dándole una explicación que creo bastante aceptable (v. Damasio. p. ej.). Primero hay que distinguir lo que puede ser la conducta lingüística de la actividad de la Consciencia.
b.3.5.2.- La Consciencia es el momento intermitente en el que la mente descubre una unidad o pauta en su actividad psicológica. El lenguaje es parte de esta actividad psicológica compleja, mezclada con la percepción, el cálculo, los marcadores emocionales... al parecer, esta actividad no cesa, pero sólo emerge, como unidad, como ego, una mínima parte de ella en la actividad consciente. Hablarse a si mismo puede ser un momento fronterizo en donde la consciencia roza con la inconsciencia..., de ahí que parezca que hay novedad, creación de la nada, un hablarse dialéctico dentro de uno mismo.
Edu: En ocasiones desconocemos por completo que tenga un uso y lo habitamos en el modo del juego; es un juego que no tiene por qué llevarnos a algo exterior a sí mismo. Sin embargo estos momentos no son en modo alguno el resultado de una voluntad y mucho menos del genio artístico. Se dan como se da el aburrimiento: sobrevenido. Pronto, ese modo de lucidez, desaparece en la pura nada o deviene instrumento.
a.1-El lenguaje es un hábitat en cierta proporción inexplorado que permite la posibilidad de perderse en él.
a.2.- Este perder el rumbo dentro del espacio lingüístico no es una acción buscada, sino necesaria de un momento mental potencial inconsciente y a-competencial, o no conductual, algo así como devenido de la propia materia psicológica.
a-3.- Este momento mental dentro del espacio lingüístico puede verse como un juego, una creación.
a-4- El lenguaje no es una acción (no hay planificación), sino inspiración [modo de lucidez], que deviene instrumento [de manera, entiendo, necesaria] o desaparece [también, entiendo, de manera necesaria].
Pero...
b.1.- El lenguaje, como dijimos supra, no es hábitat, sino conducta. El hábitat es el comportamiento comunicativo.
b.1.1- Hay cierta identidad con el Idealismo en esta forma de ver el Lenguaje, como si el agente real fuera un ente exterior al espacio mental que permite cierta conexión con un noúmeno inspirador. Me recuerda a Vossler, a Croce, Saussure, Agustín, Platón...
b.1.2.- La capacidad lingüística, la competencia lingüística de Chomsky, o la conducta lingüística, derivada del comportamiento comunicativo (bios comunicativo deriva subespecie en conducta humana) es, entre otras, simbólica.
b.1.2.1.- El símbolo, ciertamente, es convencional, pero no contingente en la relación que toma una vez asumida la integración, a no ser por variación de sentido dentro de la comunidad. No hay cambio por inspiración individual, sino por el uso.
b.1.2.2.- El símbolo es una realidad mental fluctuante, como todo elemento psicológico, potencialmente ampliable o reducible en sus semas, extenso en su medio comunicativo o social (público) e intenso en su naturaleza mental (habita en un cerebro y en todos).
b.1.2.3. Esta indeterminación permite que un sistema lingüístico no tenga que renovarse cada vez que una persona piensa, que, en cada acto de habla, se tenga que aprender primero el lenguaje del otro.
b.1.2.4. Esto es un problema. Esta indeterminación permite, a la vez que planifica, aventurar, anticipar, pues errar, falsear, mentir..., fantasear en suma, porque al desligarse el uso del referente, el lenguaje es potencialmente abarcador de una totalidad.... Y esto, muchas veces, es un problema...
b.1.2.5.- No es particularmente caprichoso el lenguaje en este aspecto. Muchas de las características del hombre parecen haber adoptado soluciones evolutivas comprometidas para el individuo, aunque muy útiles hablando de especie. El cuerpo suele ahorrar energías y evoluciona con lo que tiene. Un ejemplo: la excreción de orina en el macho, se hace por el mismo conducto que por el que eyacula, lo que permite ahorrar el coste de dos apéndices para dos actividades semejantes, excretar, aunque ello nos cueste ciertas infecciones... Otro ejemplo: un mismo tracto para tragar comida y respirar. En el momento de la ingestión, es imposible respirar, y eso parece un riesgo asumido, así como podemos atragantarnos y morir de asfixia.
b.1.2.6.- Que el sistema lingüístico sea simbólico es un mal necesario, si es que es un mal, porque está bastante justificado si observamos lo bien que le ha venido en ciertos aspectos al ser humano para, no solo habitar la tierra, sino (y aquí sí) “instrumentalizarla” en su beneficio.
b.1.3.- El problema de la desvinculación del sistema lingüístico del referente se salva fácilmente en cuanto es el sistema el que está desvinculado, no el agente que origina tal sistema. El hombre sigue sujeto a la gravedad, y a las leyes de la nutrición... El “hacer lingüístico” topa con lo “ya hecho”,; en otras palabras, no hay más juego que el que se desarrolla sobre un tablero y en torno a un reglamento.
Gracias por atenderme, y disculpen la extensión...
En muchas conclusiones coincidimos, en otros aspectos, tal vez la forma de la narración en algunos puntos me parece que debe ser más cuidada para no inducir (salvo que sea lo deseado) una visión teleológica ("lo bien que le ha venido", por ejemplo) y tautológica ("en su beneficio"), cuando yo diría que el instrumento y la función son una cosa en tanto estén y sigan ahí, o sea, que el instrumento se legitima como tal al ser usado, y es usado con vistas a lo que se piensa que sirve (sirva o no según pesen más o menos unas u otras "pulsiones": por ejemplo, el placer de comer "mal" y el perjuicio del colesterol). Etc. De todos modos hay buenas precisiones y ha sido interesante el intercambio, al menos para mí. Un saludo y hasta otra.
El lenguaje es lo único que nos ha hecho poner de acuerdo a los seres humanos. Es una cuestión de significados, de identificaciones. Necesitamos estar y sentirnos ordenados, de ahí viene el lenguaje. Da igual el tipo de herramienta (idioma) que se use. Pero lo trascendente es la idea de que lo que es y representa (lo que se ve y hace sentir) es común a todos los miembros de nuestra especie. Luego está la cultura, aquí se sofistica el lenguaje, se apelmaza y se volatiliza, pero esta es otra característica de lo humano. La especificidad del medio hace que lo que se use para comunicar esté íntimamente ligado a aquél. La multiplicidad de medios hace a su vez prolija la herramienta, pero ésta no es el lenguaje, del mismo modo que el piano no es la música.
De lo que se puede hablar da lo mismo hablar...
ResponderEliminarSigue sin convencerme la noción del lenguaje como instrumento. Me sigue pareciendo que la sumisión de las palabras a las categorías técnicas no responde a su específica realidad. Creo que extender la idea de todo uso del lenguaje como "instrumento" quiere decir reducir precisamente la idea de usos del lenguaje a un solo uso: Si todo uso del lenguaje refiere a usar las palabras como herramientas para "hacer" cosas distintas, ¿no es así que en nrigor sólo existe un uso, el de la instrumentalidad y la hegemonía de la metáfora técnica?
ResponderEliminarPor otro lado, para añadir algo más, creo que existe una diferencia entre el instrumento técnico y las palabras que no es deseable despreciar: el instrumento sirve para hacer cosas a su través, mientras que en el habla no sólo realizamos a través del lenguaje, sino que realizamos EN el mismo lenguaje.
Intentaré proseguir
Decir "instrumento" parece suponer en cierto modo una teleología, una "meta" predefinida. Creo que se usa el lenguaje, como se usa la mano. Creo que es un resultado evolutivo que se descubre y usa porque "está ahí" en un momento dado más o menos a la vez que "la conciencia" de aquello. Como tal resultado, es como los demás: es imperfecto en más y en menos. Al tenerlo, lo usamos para muchas cosas, no simplemente para "hacer" sino para "parecer", para "lo lúdico", para "lo innecesario", para "impresionar", "conmover", "confundir", "mentir", etc., pero está ahí y cada vez que nos venga bien usarlo (o creamos que nos viene bien, o sintamos que nos viene bien...) lo usaremos, como bien sepamos y con resultados satisfactorios o penosos... "Está ahí" y también nos permite llorar, expresar desesperación, herir, defendernos... En estos sentidos hasta nos permite hablar con "uno mismo", por ejemplo, al despotricar contra el mundo, al "hablar con Dios", etc. Por eso nunca (entiendo) será posible el sueño apaciguador del positivismo lógico. Entre otros.
ResponderEliminarVaya... Borja, cada día pareces más Heideggeriano. ¿para cuándo "Ser y Tiempo"?
ResponderEliminarEs verdad lo que dices, pero al fin y al cabo hasta para hablar del lenguaje tenemos que acudir al lenguaje.
En una cosa te voy a dar la razón: el lenguaje no siempre es un instrumento entendido según la metáfora de la técnica, aunque sí es siempre un "hacer algo" o si prefieres un simple "hacer". En tanto que instrumento técnico, como señala Carlos, tiene unos fines determinados y un uso, pero no siempre ocurre esto con el lenguaje. En ocasiones desconocemos por completo que tenga un uso y lo habitamos en el modo del juego; es un juego que no tiene por qué llevarnos a algo exterior a sí mismo. Sin embargo estos momentos no son en modo alguno el resultado de una voluntad y mucho menos del genio artístico. Se dan como se da el aburrimiento: sobrevenido. Pronto, ese modo de lucidez, desaparece en la pura nada o deviene instrumento.
¿Serías capaz de decirme qué quiere decir cada uno, o tú en particular, Eduardo, cuando se califica a alguien de heideggeriano con lo que cuesta entenderlo al menos en el detalle? Entiendo mucho más "nietzscheano", pero no "heideggeriano". Tal vez deba por fin seguir con Ser y Tiempo cuya versión del FCE me ha hechado para atrás varias veces después de un puñado de páginas...
ResponderEliminar¡Estoy dispuesto, como le dije a mi sobrino (¡otro que este año acaba Filosofía, y al que podríamos invitar a sumarse a Feacios si os pareciera bien!) a... tomar clases de Heidegger para ir más allá de mi visión genérica en base a la lectura de unas pocas páginas y conferencias de sus últimos tiempos (como Tiempo y ser).
Un saludo (ah, por cierto: qué fue de los vinos? Nunca me quedo tranquilo cuando algo se diluye... je...)
Carlos: creo que lo de "heideggeraniano" no es más que un pequeño modo de azuzarme, ¿no, Edu?
ResponderEliminarAquí la palabra sí es un instrumento para darme una colleja, y supongo que la ironía que guarda proviene de aquellos años de juventud en la universidad.
En cuanto a lo del vino, tienes razón en recordarlo, porque creo que no puede quedarse en un proyecto, y además sería una buena ocasión para charlar otro rato con la excusa de la entrega.
Creo que no se me entendió (¡tanta ironía y alegoría tiene, claro, su penalización!). Preguntaba realmente acerca del sentido que le da el que lo usa en "sentido estricto" o "en serio" cuando se refiere a ciertas posiciones "aparentemente", por lo visto, "heideggeriana". ¿Se trata de hacer referencia acaso a lo especialmente "existencialista", a lo "nihilista"...? De todos modos, tendré que meterme con Herr H. antes o después... digo...
ResponderEliminarSaber que el lenguaje es una herramienta implica primero "saber" que hay algo que puede manejarse de una manera determinada para un fin específico.
ResponderEliminarUna el lenguaje es una "herramienta", tecnología de la edad del hierrro, pero la Ilíada fue escrita en la edad del bronce...
Ludwig se quedó a medias, un juego del lenguaje implica un tablero en donde desarrollar ese juego.
Sí, hay algo más allá de la herramienta; el martillo implica una madera y un clavo, si es un martillo de carpintero, pero si es un martillo de un forjador, puede implicar metales y cuñas...,
Pero que hay..., seguro que hay..., y había cosas y hechos y aconteceres mucho antes del área de Broca...
Anónimo señala hacia la ontología como "previa", y lo es en tanto sus "objetos" "soportan" o son "base material" de los "objetos" de la epistemología. O eso asumimos necesariamente... Incluso con formas precisas que no por nada, insisto, je..., no son las mismas según quién las plasme o narre, cuándo y dónde lo haga, etc.
ResponderEliminarTomo de todos modos lo que dice Anónimo como refrendo de su parte de lo que vengo sosteniendo... en la medida de mis posibilidades... Como por ejemplo lo que dije en relación a "lo real" en mi(s) comentario(s) al post de Oscar (quien por cierto creo que me debe una réplica después de mi "aclaración").
El lenguaje como capacidad termina resolviéndose en algún tipo de lengua.
ResponderEliminarProbad a hacer esta operación así:
CCCLV
+ MM
+ D
O así:
355
+ 2000
+ 500
¿Son las dos operaciones matemáticas? utilizan la misma “lengua”?
¿Por qué el lenguaje permite el error y la mentira? ¿Por qué fantasea?
ResponderEliminarPorque es simbólico, porque la apertura del símbolo a un sistema en el que todas las posibilidades pueden encontrar su asiento nos permite conjeturar hipótesis, aventurar teorías...
¿Le compete al martillo que en vez de percutir sobre un clavo, quien lo maneja dirija su acción contra la cabeza de otra persona?
¿Le compete al lenguaje errar, falsear o fantasear?
¿Frente a la capacidad lingüística hay una habilidad cognoscitiva?
¿Frente al lenguaje está la cosa? Ver el lenguaje como un instrumento?
O es más bien el mundo lo que se quiere instrumentalizar, hormarlo lingüísticamente?
De esto:
ResponderEliminar"Porque es simbólico, porque la apertura del símbolo a un sistema en el que todas las posibilidades pueden encontrar su asiento nos permite conjeturar hipótesis, aventurar teorías..."
Para mí lo peor es el "Porque...". El lenguaje es un resultado, nace en la interacción y por ello se debe a ella, es "prisionero" de la interacción. Por eso "se miente" con él y por eso "se (cree) decir la verdad (... mintiéndose)". Lo mandatorio es el interacctuar, y si se puede hablar... pues mejor para la interacción, que complejiza la supervivencia y responde a su imperativo conservador. El lenguaje también es cosa. Cosa es cosa para el hombre que necesita y/o le viene bien usar la cosa. Pero toda cosa tiene su propia dinámica y está entre las cosas de manera distinta y en relaciones distintas con las cosas (incluso con las cosas que la componen, y que a su vez interactuan con las cosas...), y todo eso es creación constante de cosas y sus relaciones... Sólo es una pretensión irrealizable establecer un cuadro completo. No sólo por inconmensurable sino porque todo a nuestro alrededor se recrea sistemáticamente. No obstante, nos basta la aproximación coherente llena allí donde haga falta el relleno de invenciones metafísicas (y la ontología es una parte, y la epistemología, y la ciencia...) En este sentido, el lenguaje nos viene bien, pero en el fondo, es así porque lo tenemos, nada más, y porque al tenerlo hemos aprendido a usarlo en mayor o menor medida, con la misma imprecisión e imperfección que todo lo que está en equilibrio inestable en el mundo... según lo aprehendemos y hasta donde lo aprehendemos.
Bueno, todo sea por juguetear un poco con todo esto...
Un saludo.
¿Es esto lenguaje? ¿Es sólo lenguaje?
ResponderEliminara) El electrón se mueve en una órbita circular alrededor del núcleo bajo la influencia de la atracción Coulombiana de éste, obedeciendo las leyes de la mecánica clásica.
b) Dentro de las infinitas órbitas clásicas, el electrón se mueve sólo en aquellas en las que el momento angular orbital L tiene los valores L=nh=nh/ 2π , donde n=1,2,3,….
c) Cuando el electrón se mueve en una órbita permitida, no irradia energía electromagnética a pesar de ser acelerado constantemente y por lo tanto su energía total E permanece constante.
d) Un electrón que se mueve inicialmente en una órbita de energía Ei puede cambiar discontinuamente su movimiento y pasar a moverse en otra órbita de energía Ef ; cuando esto ocurre se emite un fotón cuya frecuencia es ν =(Ei −Ef)/h.
¿Los postulados de Bohr..., instrumentalizan el lenguaje, son tan sólo lenguaje, describen o recrean una realidad no lingüística, traducen la matemática o la reinventan con categorías nuevas como verbos, sustantivos, preposiciones, etc...?
No creo que estos postulados tengan la misma naturaleza que la siguiente frase: “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme...”, o de: “ Cuando los elefantes se aburren de machacar la hierba de la sabana, agitando sus tremendas orejas, son capaces de alzarse una decenas de metros sobre el suelo y dar brincos, si no volar, durante varios segundos, nunca más de 30, por entre los matorrales”.
¿Es esto lenguaje? ¿Es sólo lenguaje?
ResponderEliminara) El electrón se mueve en una órbita circular alrededor del núcleo bajo la influencia de la atracción Coulombiana de éste, obedeciendo las leyes de la mecánica clásica.
b) Dentro de las infinitas órbitas clásicas, el electrón se mueve sólo en aquellas en las que el momento angular orbital L tiene los valores L=nh=nh/ 2π , donde n=1,2,3,….
c) Cuando el electrón se mueve en una órbita permitida, no irradia energía electromagnética a pesar de ser acelerado constantemente y por lo tanto su energía total E permanece constante.
d) Un electrón que se mueve inicialmente en una órbita de energía Ei puede cambiar discontinuamente su movimiento y pasar a moverse en otra órbita de energía Ef ; cuando esto ocurre se emite un fotón cuya frecuencia es ν =(Ei −Ef)/h.
¿Los postulados de Bohr..., instrumentalizan el lenguaje, son tan sólo lenguaje, describen o recrean una realidad no lingüística, traducen la matemática o la reinventan con categorías nuevas como verbos, sustantivos, preposiciones, etc...?
No creo que estos postulados tengan la misma naturaleza que la siguiente frase: “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme...”, o de: “ Cuando los elefantes se aburren de machacar la hierba de la sabana, agitando sus tremendas orejas, son capaces de alzarse una decenas de metros sobre el suelo y dar brincos, si no volar, durante varios segundos, nunca más de 30, por entre los matorrales”.
A veces una corta frase "orienta" y a veces hace falta toda una novela. La "orientación" se consigue a veces de manera directa y hasta impositiva (los 10 mandamientos) o buscando "conmover" (los mitos más sutiles, la literatura...). La ciencia intenta "orientar" en dos o tres fases: primero asumiendo que su valor emancipador es absoluto y deájndolo fuera de discusión; después poniéndose a trabajar sin más, "sirva o no", sea o no "moral"; por fin... sirviendo al poder o sea cediéndole la función "orientadora". Esta "división de fases y del trabajo" nacida de la apriorística asunción de que "la verdad" será alcanzada "trabajando" en términos científico-modernos y dejando de hablar de lo que no se puede hablar (o "se muestra"), se la debemos al racionalismo ilustrado (Kant en primer lugar de importancia).
ResponderEliminarEn ese sentido, los productos realizados mediante el lenguaje (y la escritura, que añade otra dimensión al asunto y le da al lenguaje "más" atributos que "antes" de su invento) son comparables si se los toma a cada uno en su especificidad y no si sólo se los compara formalmente y por trozos (unas palabras de El Quijote, no dicen nada, o al menos no dicen lo que toda la novela, etc.).
En sí, de todos modos, el lenguaje es algo más en nosotros. Otra cosa son sus productos, insisto y lo que hacen/se-hace-con ellos.
Hum, creo que lo voy perfilando de alguna mnanera...
El lenguaje, capaz de predecir y de errar, porque es capaz de aventurar. Hace 20.000 años, el hombre necesitaba aventurar un acontecimiento... la caza del mamut....
ResponderEliminarSe planifica, se inventa, se juntan signos lingüísticos, se alientan y dan ánimos... Luego parten hacia donde pacen estos paquidermos... son muy grandes..., esto es observable, y deciden que no es buena idea, mejor regresar y descarnar la carroña de una búfala kilómetros más atrás...
Hace apenas 100 años se necesita aventurar una idea para el movimiento browniano..., y nació la incertidumbre..., hablar de lo invisible, cerrar la crítica de Kant y volver al noúmeno...
¿Qué movía a Heissemberg a no aceptar la mecánica de ondas de Schrödingen? Un problema de estilo. A él le gustaba más la mecánica de matrices que, por su puesto, él había elaborado...
-Borja: Sigue sin convencerme la noción del lenguaje como instrumento. Me sigue pareciendo que la sumisión de las palabras a las categorías técnicas no responde a su específica realidad. Extender la idea de todo uso del lenguaje como "instrumento" reduce la idea de usos del lenguaje a un solo uso: Si todo uso del lenguaje refiere a usar las palabras como herramientas para "hacer" cosas distintas, ¿no es así que en rigor sólo existe un uso, el de la instrumentalidad y la hegemonía de la metáfora técnica? Por otro lado, para añadir algo más, creo que existe una diferencia entre el instrumento técnico y las palabras que no es deseable despreciar: el instrumento sirve para hacer cosas a su través, mientras que en el habla no sólo realizamos a través del lenguaje, sino que realizamos EN el mismo lenguaje.
ResponderEliminara.1.- Hay una naturaleza de la palabra devaluada al ser limitada a un sistema categorial técnico que convierte a la capacidad lingüística humana del lenguaje en un uso instrumental, técnico, [entiendo aquí] facultativo de un discurso característico. Pero este uso es sólo uno de sus usos posibles.
a.2.- Instrumentalizar el lenguaje implica una externalización de un agente y un paciente no lingüísticos, en el que el primero usa un instrumento [mental], que es el lenguaje, para afectar a un segundo. Pero ese agente en realidad no es externo al lenguaje, sino interno [no sé bien si consustancial] y recíproco.
a.2.1.- Si el lenguaje es instrumento, no implica que, al menos, el paciente deba participar de él para ser afectado. Bástese la idea de que una persona puede instrumentalizar un taco de hierro acoplado a un mango [martillo] para golpear un clavo; pues el martillo y el clavo no han de ser consustanciales, es decir, el martillo no implica la existencia de un clavo (puede golpearse cualquier otra cosa); lo que sí implica el martillo es una acción, la de percusión eficiente, al ser instrumentalizado por un agente, quien golpea.
a.2.2.- En el acto de habla, ha de haber una relación inequívoca y, de alguna manera, consustancial, entre el agente y el paciente, siempre visto la alocución como algo que de enuncia para repercutir en alguien.
Pero...
b.1.- El lenguaje es paradigmático, luego no hay sumisión del lenguaje al tecnicismo, sino especialización semántica de un tipo de palabras que originan discursos. La palabra /mano/ implica semas diversos que en el acto de habla podrán ser técnicos en diversos campos (la mano para un fisioterapeuta, para un escultor, para un pianista, para un especialista en manicuras)
b.1.2. La posible sumisión del lenguaje al instrumentalismo se daría en un nivel muy superior, en el propio acto de habla, si no hubiera lugar a más semas [o sentido completo] que los impuestos por uno de los interlocutores en todo momento de la acción comunicativa y en todo lugar.
b.1.3. Complicar el acto de habla asumiendo que es el lenguaje es un hábitat, origina una posición extravagante en el sentido de que el agente-paciente del acto del habla terminan habitando un espacio que ellos mismos componen, originan...: es como decir que Dios termina habitando el Paraíso.
b.1.4.- Creo que esto es un error al confundir lenguaje con comunicación. El acto de habla se realiza en el comportamiento comunicativo, con una capacidad mental denominada lenguaje
-Carlos: Decir "instrumento" parece suponer en cierto modo una teleología, una "meta" predefinida. Creo que se usa el lenguaje, como se usa la mano. Creo que es un resultado evolutivo que se descubre y usa porque "está ahí" en un momento dado más o menos a la vez que "la conciencia" de aquello. Como tal resultado, es como los demás: es imperfecto en más y en menos. Al tenerlo, lo usamos para muchas cosas, no simplemente para "hacer" sino para "parecer", para "lo lúdico", para "lo innecesario", para "impresionar", "conmover", "confundir", "mentir", etc., pero está ahí y cada vez que nos venga bien usarlo (o creamos que nos viene bien, o sintamos que nos viene bien...) lo usaremos, como bien sepamos y con resultados satisfactorios o penosos... "Está ahí" y también nos permite llorar, expresar desesperación, herir, defendernos... En estos sentidos hasta nos permite hablar con "uno mismo", por ejemplo, al despotricar contra el mundo, al "hablar con Dios", etc. Por eso nunca (entiendo) será posible el sueño apaciguador del positivismo lógico. Entre otros.
ResponderEliminara.1- No todo instrumento supone un fin específico. Ha de entenderse lenguaje como capacidad lingüística, como instrumento, y la mano como capacidad prensora, como instrumento.
a.2.- No hay más fin en esta instrumentalización que el de habilitar soluciones en la interacción con el entorno.
a.2.1.- Al igual que no utiliza la mano igual un prestidigitador, que un cirujano o un arquero, no utilizarán el lenguaje distintos agentes en entornos diferentes, ni el propio agente según interactúe en un momento u otro.
Pero...
b.1- El lenguaje denominado común parece tener ciertas funcionalidades. Funcionalidades y no Funciones porque ninguna ha de verse superior a otra, ni ha de verse como un algo compacto que va usándose y resolviéndose en funciones en cada acto, sino como una materia maleable que se adapta, cambia, selecciona o superpone dependiendo de un acto de habla dado, abierto, inesperado, imprevisible en cierto grado.
b.2- El lenguaje, su funcionalidad, no depende de la voluntad del agente, sino de la interacción entre agente y paciente del acto. No se puede usar lúdicamente el lenguaje si pretendemos superar las pruebas de selección para un puesto de trabajo, o razonar con una mujer que acaba de enviudar intentándola hacer comprender que todos somos mortales y bastantes frágiles al impacto de un automóvil.
b.2.1.- Sí hay una finalidad en cada acto de habla, aunque no transcendente, sino práctica, el de la comunicación eficiente.
b.3.- Vuelve a poder decirse que es un error confundir lenguaje con comunicación. El acto de habla se realiza en el comportamiento comunicativo, con una capacidad mental denominada lenguaje, capacidad maleable y adaptativa al proceso del acto de habla.
b.3.1.- Comportamiento Comunicativo → [una] Acción [comunicativa eficiente] → varios modelos de actuación : M acción= ƒ 1, ƒ 2, ƒ3, ƒx, ..., ƒn funcionalidades
ResponderEliminarb.3.1.1.- Comportamiento Comunicativo → Chomunicación [humana] → M acción
b.3.1.2.- Instrumentalización = M acción ƒn,
b.3.1.3.- CC = Ch [M ƒn: I ] ,
b.3.2.- Diferentes tipos de actos de habla requieren, en suma, una sólo caracterización como acto, una sola teoría de la actividad comunicativa anterior, primaria, frente a las derivaciones prácticas de tal actividad.
b.3.3.- Toda acción persigue un logro, posee una motivación, una preexistencia como estrategia, una elección que, al ser mental, dada neuralmente (evolucionada, capacidad biológica) debe de estar limitada a un número concreto de pautas, necesita de una Competencia, término que a mi, particularmente me ha dejado de gustar, y prefiero denominar Comportamiento Comunicativo, y Conducta Lingüística en vez de Actuación, porque al verlo como actividad, se me queda corto tanto internismo psicológico.
b.3.4.- Es posible, entonces, determinar un grado de eficiencia en cuanto el Lenguaje como conducta, o mejor dicho subiendo niveles, como comunicación entre hombres (humana), tiene un uso que si bien no está exento de interpretación por estar motivado, es interpretable.
b.3.4.1.- Puede decirse de una Instrumentalización que es fallida o incorrecta si la motivación de tal instrumentalización no produce resultado eficiente.
P. ej.: Observar microorganismos con un telescopio = Instrumentalización fallida.
Observar al vecino con un telescopio = Instrumentalización (tras interpretación).
En Ch: Uso lúdico del lenguaje en entrevista de trabajo = Instrumentalización fallida.
Uso lúdico del lenguaje en un escenario = Instrumentalización (tras interpretación).
b.3.5.- Pero no siempre puede Instrumentalizarse el Lenguaje. A veces el lenguaje nos traiciona y se presenta como independiente de nuestra conciencia, como conducta instintiva, como un posible ƒ x dentro del M ƒn . A esto se le denomina errores, como las confesiones accidentales que los psicoanalistas buscan al obligar al paciente a hablar y a hablar hasta que se borran los límites de la Conducta aprendida y aparece una relación de significados reveladora.
b.3.5.1.- El lenguaje o comunicación con uno mismo, “hablarse a uno mismo”, la neurociencia está dándole una explicación que creo bastante aceptable (v. Damasio. p. ej.). Primero hay que distinguir lo que puede ser la conducta lingüística de la actividad de la Consciencia.
b.3.5.2.- La Consciencia es el momento intermitente en el que la mente descubre una unidad o pauta en su actividad psicológica. El lenguaje es parte de esta actividad psicológica compleja, mezclada con la percepción, el cálculo, los marcadores emocionales... al parecer, esta actividad no cesa, pero sólo emerge, como unidad, como ego, una mínima parte de ella en la actividad consciente. Hablarse a si mismo puede ser un momento fronterizo en donde la consciencia roza con la inconsciencia..., de ahí que parezca que hay novedad, creación de la nada, un hablarse dialéctico dentro de uno mismo.
Edu: En ocasiones desconocemos por completo que tenga un uso y lo habitamos en el modo del juego; es un juego que no tiene por qué llevarnos a algo exterior a sí mismo. Sin embargo estos momentos no son en modo alguno el resultado de una voluntad y mucho menos del genio artístico. Se dan como se da el aburrimiento: sobrevenido. Pronto, ese modo de lucidez, desaparece en la pura nada o deviene instrumento.
ResponderEliminara.1-El lenguaje es un hábitat en cierta proporción inexplorado que permite la posibilidad de perderse en él.
a.2.- Este perder el rumbo dentro del espacio lingüístico no es una acción buscada, sino necesaria de un momento mental potencial inconsciente y a-competencial, o no conductual, algo así como devenido de la propia materia psicológica.
a-3.- Este momento mental dentro del espacio lingüístico puede verse como un juego, una creación.
a-4- El lenguaje no es una acción (no hay planificación), sino inspiración [modo de lucidez], que deviene instrumento [de manera, entiendo, necesaria] o desaparece [también, entiendo, de manera necesaria].
Pero...
b.1.- El lenguaje, como dijimos supra, no es hábitat, sino conducta. El hábitat es el comportamiento comunicativo.
b.1.1- Hay cierta identidad con el Idealismo en esta forma de ver el Lenguaje, como si el agente real fuera un ente exterior al espacio mental que permite cierta conexión con un noúmeno inspirador. Me recuerda a Vossler, a Croce, Saussure, Agustín, Platón...
b.1.2.- La capacidad lingüística, la competencia lingüística de Chomsky, o la conducta lingüística, derivada del comportamiento comunicativo (bios comunicativo deriva subespecie en conducta humana) es, entre otras, simbólica.
ResponderEliminarb.1.2.1.- El símbolo, ciertamente, es convencional, pero no contingente en la relación que toma una vez asumida la integración, a no ser por variación de sentido dentro de la comunidad. No hay cambio por inspiración individual, sino por el uso.
b.1.2.2.- El símbolo es una realidad mental fluctuante, como todo elemento psicológico, potencialmente ampliable o reducible en sus semas, extenso en su medio comunicativo o social (público) e intenso en su naturaleza mental (habita en un cerebro y en todos).
b.1.2.3. Esta indeterminación permite que un sistema lingüístico no tenga que renovarse cada vez que una persona piensa, que, en cada acto de habla, se tenga que aprender primero el lenguaje del otro.
b.1.2.4. Esto es un problema. Esta indeterminación permite, a la vez que planifica, aventurar, anticipar, pues errar, falsear, mentir..., fantasear en suma, porque al desligarse el uso del referente, el lenguaje es potencialmente abarcador de una totalidad.... Y esto, muchas veces, es un problema...
b.1.2.5.- No es particularmente caprichoso el lenguaje en este aspecto. Muchas de las características del hombre parecen haber adoptado soluciones evolutivas comprometidas para el individuo, aunque muy útiles hablando de especie. El cuerpo suele ahorrar energías y evoluciona con lo que tiene.
Un ejemplo: la excreción de orina en el macho, se hace por el mismo conducto que por el que eyacula, lo que permite ahorrar el coste de dos apéndices para dos actividades semejantes, excretar, aunque ello nos cueste ciertas infecciones...
Otro ejemplo: un mismo tracto para tragar comida y respirar. En el momento de la ingestión, es imposible respirar, y eso parece un riesgo asumido, así como podemos atragantarnos y morir de asfixia.
b.1.2.6.- Que el sistema lingüístico sea simbólico es un mal necesario, si es que es un mal, porque está bastante justificado si observamos lo bien que le ha venido en ciertos aspectos al ser humano para, no solo habitar la tierra, sino (y aquí sí) “instrumentalizarla” en su beneficio.
b.1.3.- El problema de la desvinculación del sistema lingüístico del referente se salva fácilmente en cuanto es el sistema el que está desvinculado, no el agente que origina tal sistema. El hombre sigue sujeto a la gravedad, y a las leyes de la nutrición...
El “hacer lingüístico” topa con lo “ya hecho”,; en otras palabras, no hay más juego que el que se desarrolla sobre un tablero y en torno a un reglamento.
Gracias por atenderme, y disculpen la extensión...
En muchas conclusiones coincidimos, en otros aspectos, tal vez la forma de la narración en algunos puntos me parece que debe ser más cuidada para no inducir (salvo que sea lo deseado) una visión teleológica ("lo bien que le ha venido", por ejemplo) y tautológica ("en su beneficio"), cuando yo diría que el instrumento y la función son una cosa en tanto estén y sigan ahí, o sea, que el instrumento se legitima como tal al ser usado, y es usado con vistas a lo que se piensa que sirve (sirva o no según pesen más o menos unas u otras "pulsiones": por ejemplo, el placer de comer "mal" y el perjuicio del colesterol).
ResponderEliminarEtc.
De todos modos hay buenas precisiones y ha sido interesante el intercambio, al menos para mí.
Un saludo y hasta otra.
El lenguaje es lo único que nos ha hecho poner de acuerdo a los seres humanos. Es una cuestión de significados, de identificaciones. Necesitamos estar y sentirnos ordenados, de ahí viene el lenguaje. Da igual el tipo de herramienta (idioma) que se use. Pero lo trascendente es la idea de que lo que es y representa (lo que se ve y hace sentir) es común a todos los miembros de nuestra especie. Luego está la cultura, aquí se sofistica el lenguaje, se apelmaza y se volatiliza, pero esta es otra característica de lo humano. La especificidad del medio hace que lo que se use para comunicar esté íntimamente ligado a aquél. La multiplicidad de medios hace a su vez prolija la herramienta, pero ésta no es el lenguaje, del mismo modo que el piano no es la música.
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