Los mitos originarios no sólo son testigos veraces de como una comunidad se ve a sí misma en pública asamblea, sino que sobre todo resultan vectores de proyección hacia el futuro, diseños arquitectonicos del devenir donde el pasado,padre del presente, ya barrunta los mares venturosos por donde navegará el joven nieto. Sobre todo porque el mito originario, si no se construye en el presente, si que es aprovechado en el ahora para alimentar a la manada.El mito de origen, que contesta pregunta tan señalada para el ethnos, no suele ser tan ambiguo y aplicable como el resto de mitemas, no es ese chispazo elusivo de conocimiento y poesía( si es que no siempre están amancebadas); el mito de origen, con toda su oscuridad aparente es siempre iluminado por la antorcha del Poder. Porque el discurso se constituye en el mayor ejemplo del fenotipo extendido, en la mayor palanca de la bastarda selección natural.
De donde viene el "yo" y con él "los nuestros" se perpetúa la primera hostia,el primer abrazo, que dieron molde al Caos Informe. Es más difícil pero más duradero, legitimar que dar coces, aunque a veces se solapen y los mandados no sepan muy bien que es lo que toca esa mañana.
Los atenienses creían que eran hijos de la Tierra y por tanto que eran los únicos que tenían derecho a ella. De las entrañas de la misma surgió Cecrops, el Dios Serpiente y trajo con Él la sabiduría secreta del engaño y la agricultura, ambas falsas promesas de inmortalidad. Los Hijos de la Tierra la aman como nadie y sus palabras y actos son la semilla con que la fecundan como Zeus Olimpico en lluvia desatada. Donde esté la areté ateniense allí está la tierra bienamada y justo es que se extienda por el Ponto vinoso. Los atenienses toman los frutos de la Tierra, el trigo dorado, el aceite jugoso, el vino alegre y por eso son civilizados, equilibrados, en el justo medio, no como los bárbaros que comen hamburguesas y beben sangre caliente.En su auctoctonía basaban su pretensión de comandar la Koiné helena frente a invasores y traidores, imbuidos del perverso autoengaño de los buenos misioneros. No se podía esperar mucho más de pueblo tan mezquino.
Los romanos, malvados imperialistas, explotadores viles, constructores de murallas de piedra y acero, tienen un mito menos edificante que el ateniense, pero igual de ilustrador sobre sus actos. Si bien Virgilio trató de glorificar a la familia Julia y emparentar a Roma con el linaje Troyano (como harían después todos los pueblos de Europa, que de creerles, nos llevarían a maliciar que la excelsa Ilion no ardió demasiado ante los fuegos aqueos), sin embargo el mito de origen más poderoso de los romanos es el que los hace hijos de la Loba y de Marte, aunque luego se mezclarían con los linajes latinos de los hijos de Eneas.Roma es procreada por extranjeros, por exiliados, por abandonados a la interperie.La Loba mitica pasó a ser luego la madrastra de Rómulo y Remo, llamada Luperca, es decir prostituta. Rómulo mata a su hermano por un quitame allá esas pajas y funda la ciudad más macarra del Lazio, donde sólo viven los quinquis, matasietes, ladrones, asesinos y violadores, en fin esos angelitos que raptaban sabinas y robaban ganado, pero que acogían a todos los sin patria y se la daban y que hacían saber a las hembras que lo eran.Cómo no va a salir de aquí el imperio más grande que vieron los siglos, la veneración por la ley práctica, el despojo, la aculturación, la mano de hierro del glaudius, el acueducto, la estabilidad, la agresividad,la tolerancia,en fin todo ese cúmulo de virtus que se hundió en el barro cuando Los Hijos de Puta se encontraron con otro pueblo puro, tan amado por Tacito y que iba a sembrar su pura semilla en el campo fértil de la Europa meapilas
Acaba el partido del Barça y me encuentro el texto de Santi... ¿qué pasa que te aburrías de goles y te inspiraron las musas? … Bien Santi, te echábamos en falta por estos lares.
ResponderEliminarDa la causalidad que estoy leyendo unas cosas de Umbral y tengo la misma sensación con él que contigo: por un lado me fascina la prosa, por lo macarra más que nada, y por otro me quedo con cara de bobo temiendo no haber entendido lo esencial. Corrígeme si me equivoco. Dices que los mitos sobre los orígenes tienen más verdad, más poesía por tanto, que otros que son fácilmente manipulables por el poder y nos dicen más de un pueblo que otros relatos. Encuentras en el mito romano más potencia, más verdad, más ¿voluntad de poder? Que en el mito ateniense. ¿Es eso?
Vaya historiador estás hecho. Dices que yo no soy un filósofo muy convencional pero tú debes ser la oveja negra de tu gremio: a la mierda las condiciones económicas, sociales, geográficas, políticas etc . Dime tu mito y te digo quien eres. ¿Es eso lo que les dices a los chavales? ¡Qué vergüenza!
Sabes que te quiero. Besotes.
Pdt: la Liga se nos escapa, pero vamos por la Champion.
Vale, reconozco que no me he expresado bien, tal vez he sido algo barroco o un poco elusivo, sobre todo porque quería decir lo contrario que "entendiste", a saber, que los mitos de origen tiene menos poesía y son creaciones del Poder.Y sí tu expresion del dime tu mito y te diré quien eres dice más de una sociedad que toda la jerga socieconómica,o al menos de la configuración del poder hegemónico.
EliminarY no digo que tenga más verdad ni potencia el romano, sino que cada uno expresa lo que fueron cada pueblo.unos eran meapilas imperialistas y otros también lo eran, pero deshinibidos, pues como buenos lobos, comían carne
y sobre todo, Atenas se contempla ensimismada, Roma aprende y se expande
EliminarEs verdad, leo de nuevo el primer párrafo y veo mi error. Pero sigo sin comprender. Si el mito del orígen es el más manipulable desde el poder, será el más insustancial, el más maleable, el más circunstancial. Será solamente el instrumento de la clase dirigente para mantener sus privilegiós ¿Qué verdad puede haber en en ello? Si hay verdad en el mito será en la medida en que pertenece al poeta y no al politico, si los mitos acerca del origen dicen algo verdadero será en la medida en que en ellos queda algo de lo que intuyó el poeta y no son meras coartadas al servicio de los poderosos.
ResponderEliminarSaludos
Precisamente Oscar, tiene poca verdad, salvo que como actúa de autoreferente para los poderosos ( y para todos los que se socializan con ellos),no sólo explica el pasado sino que prefigura el futuro, como profecía autocumplida.Así extrañamente, el mito vuelve a ser verdadero, porque me dice más de los antiguos griegos y romanos que las enciclopedias de Cambridge.Parece que exagero, y sin embargo es abrumador su potencia explicativa.
EliminarY por ultimo, hay mitos muy ricos en significados, muy abiertos a la interpretación, aplicables a la experiencia particular y colectiva, pero todos los mitos de origen , sean hechos por poetas y sacerdotes , están al servicio del poder, si no no se repetirían a la luz del fuego o ante los ojos del dios.La mayor parte de tales relatos no quieren más que prestigiar una Casa, una etnia.Lo chocante es que con estos casi se puede resumir un legado, una esencia, la esencia de Occidente en mitos tan contrapuestos.